LUMBRERAS 69 DUNA 74: CUANDO LA GLORIA SE TE ESCAPA DE ENTRE LOS DEDOS…

La crónica del Lua, PATROCINADA POR GRUPO EMPRESARIAL BLAYMAR,  por José David Millán.

Un instante, un detalle, un momento de inspiración o de falta de concentración, un poco más de oxígeno en los pulmones o simplemente, de suerte. Son tantos los factores que influyen en que la balanza de un encuentro se decante de un lado u otro que casi parecen ironías del azar o de un ser extra mundano que mueve los hilos. Lo vivido el pasado sábado en el pabellón de Puerto Lumbreras tardará en olvidarse porque cualquier resultado era posible en cada uno de los 45 minutos que duró el partido CB Lumbreras-Mil Palmeras de Campoamor, de los 2.700 segundos. Doce jugadores por los locales, ocho por los visitantes. Dos banquillos entregados y 30 almas en las gradas dejándose las uñas y la voz. Un choque de los que uno siente sana envidia por no poder disfrutar sobre la pista. A buen seguro, uno de los mejores de lo que va de temporada en 2ª Autonómica. Intenso, emocionante, tenso, vibrante.

El comienzo de la batalla fue fulgurante por parte de los lumbrerenses, que se colocaron rápidamente 10-2 arriba, con una defensa espectacular que se llevaba todos los rebotes que caían en sus manos. Pero el primer cuarto no acabaría tan bien como empezó. Perdíamos tantos balones como recuperamos, nos atascamos en ataque y hubo que esperar casi hasta los últimos segundos para poder ver anotar al Lua, y Duna se llevó el primer parcial por 12-16, enseñando desde ya sus armas: que están bien comandados por sus bases, que corren como demonios a la contra, que no fallan un tiro libre y que si les dejas de 3 también te enchufan alguna. Pero no se quedaba ahí la cosa, porque si Lumbreras le echaba toda la casta que tiene y más al asunto, Duna con 8 tíos se ponía con su zona press primero y con defensa en toda la pista después, haciendo mucho daño en la salida del balón lumbrerense, y demostrando una gran capacidad física y una muy buena preparación. Eso sí, los de Santi dejaron claro que si este equipo que el año pasado nos endosó 40 puntos en la ida y 80 en la vuelta querían ganar, iban a sudar tinta para ello, y no perdieron ni un solo parcial más hasta el final. Y eso que en el segundo las cosas se volvieron a poner pardas con otra exhibición de puntería de los de San Pedro desde 6,25, más contras y más correr para atrás sin dejar al rival que haga las suyas. Las dos defensas se mostraron nuevamente implacables, en un duelo de poder a poder que en este cuarto acabó dejando el marcador en 25-28. Esta vez los que remontaban eran los lumbrerenses, a base echarle muchos "huevos" al tema, y con una actuación espectacular de “Juanito” bajo los aros. Descanso, 13-12 en el parcial, la sensación de que debíamos estar más concentrados, menos nerviosos, hablar menos y jugar más, porque además los árbitros contribuían al show con un partido nefasto perjudicando a ambos equipos y manejando el encuentro a base de señalar técnicas. Les vino grande y no supieron salir del agujero.

En el tercero… pues más triples de ellos, más presión en toda pista pese a que se iban cargando de faltas los 8 que vinieron; parecían los conejos de Duracell, impresionante despliegue, y el Lua que volvía a ganar el parcial por un punto de nuevo (15-14) pero que seguía a la deriva a pesar de estar haciendo su mejor partido hasta el momento, con una grandísima e intensa defensa y un juego de ataque con las ideas más claras.

Con 40-42 se llegó al último acto del encuentro, con los nervios a flor de piel tanto en el banquillo como en la grada, y con los árbitros que ya no sabían qué hacer para que nos sentáramos y contuviéramos tanta tensión acumulada. Pero si estaba tenso el banquillo, el quinteto en pista tampoco se quedaba atrás, y una técnica de Dani en los primeros minutos hizo pensar en la sentencia para Duna. 40-46 y un nuevo triple de Navarro para los de San Pedro ponía la máxima ventaja para los visitantes con nueve puntos arriba. Pero Lumbreras no iba a tirar la toalla fácilmente, y a 6 para el final se puso a cuatro puntos que se quedaron en 1 a falta de 3:30. Cada canasta era todo un mundo para el otro equipo, y Duna se iba quedando con menos jugadores por quintas faltas. La victoria estaba más cerca que nunca, y aunque a 1:45 los visitantes estaban otra vez con ventaja de 6 puntos, un triple de Jose dejó las cosas en 59-61 a falta de 1 minuto. En un final de infarto, con 2 expulsados por bando y 61-61 en el marcador, Domingo prácticamente sobre la bocina y bajo la canasta falló lo que podía haber sido la victoria si no le hubieran hecho falta que no se señaló. Había prórroga. 5 minutos más con Erre con un tirón, Paco tocado y Juan haciendo todo lo posible y más pese a su maltrecho tobillo.

En el tiempo extra se hizo lo que estuvo en las manos de los lumbrerenses para intentar llevarse el triunfo, pero Duna demostró seguir siendo un gran equipo. Hasta que quedaba minuto y medio hubo opciones, pero ni las fuerzas ni la suerte eran ya las mismas. 3 rebotes para los duneros seguidos en la misma jugada de ataque y un 2+1 nos quitaban la victoria de entre los dedos, acompañado por la precipitación final con pérdida fácil de balón en ataque. 69-74 para Duna, que lo celebra como una final, y cruz para Lumbreras aunque hay que estar muy orgullosos del partido realizado, sabiendo todas las adversidades que tenemos.

 Bajamos hasta la séptima posición y damos un paso atrás importante pero no decisivo en nuestras aspiraciones, con 3 victorias (consecutivas, se cortó la racha) y 3 derrotas. Estuvimos en el cielo por unos instantes pero volvimos a la tierra. El golpe sobre la mesa quedó aplazado pero quedan muchos partidos para seguir luchando como sabemos y paso a paso alcanzar las metas propuestas. La próxima estación será Dolores de Pacheco, donde La Ermita, que este año está bastante mejor que el pasado y que pelea por un puesto en playoff, nos preparará una nueva encerrona con su clásica y particular manera de jugar, que tan buenos resultados les está dando. Será un nuevo partido de poder a poder.

Otro partido más para seguir demostrando lo que somos, un equipo humilde, deportivo y que da ejemplo allá a donde va. Un partido más para hablar sobre la pista, exponer todo nuestro juego que es mucho y bueno, y dejar de una vez por todas de discutir, quejarse, protestar a los árbitros provocando técnicas decisivas, de dar la imagen del pasado sábado delante de muchos chavales que en los próximos años quieren ser como Erre, como Domingo, como Juan, como Paco y como Juanda (no hablo de los demás porque también son el futuro) y formar parte de esta fabulosa familia del basket en Puerto Lumbreras. Porque así ha sido siempre y es dónde hay que hablar: en la pista. Porque representamos en parte a una ciudad, un escudo, un espíritu y una forma de comportarse sobre la cancha. Porque en este proyecto TODOS somos importantes: los de la cantera (presente y futuro), los que estábamos (compromiso y dedicación) y los que nos están ayudando a hacer de este equipo mucho más competitivo como son los de Águilas. Todos tenemos que remar en la misma dirección, y a partir de este viernes vamos a trabajar duro por ello, vamos a hablar en la pista y los que quieran que hablen de nosotros en los foros. Ni contestarles, la indiferencia es la mejor respuesta. Vamos a estar concentrados y a trabajar por la victoria callándonos cuando haya que callarse y dejándonos la piel para hacer del Lua cada día más grande. Por ello, soy el primero que aprovecha para desde aquí pedir perdón públicamente por la imagen dada en el encuentro ante Duna, por los comentarios realizados por mí en los foros (primero en equivocarme por hacerlo pero siempre por preservar la buena imagen del equipo), y personalmente a Paco Valera porque aunque todos nos equivocamos, todo el mundo tiene derecho a hacerlo, y más si se trata de defender a tu equipo, que para mí desde hace ya más de 3 años, es como una familia. Lua!

PDA.: no pude llevar la cuenta de las asistencias ni balones recuperados. Estos datos no reflejan al 100% el pedazo de partido que cada uno de los jugadores realizó. Mil disculpas.

CB LUMBRERAS

Quinteto inicial:

10. José Ramón “ERRE”: 12 puntos (1 rebote, 1 asistencia, 1 recuperación).

8. JOSÉ Martínez: 3 puntos (1 triple, 2 rebotes, 1 recuperación)

9. Antonio MIÑARRO: 0 puntos (1 rebote)

13. PACO Valera: 8 puntos (4 libres, 6 rebotes, 1 recuperación)

11. JUAN José Montalbán: 25 puntos (3 libres, 19 rebotes -7 ofensivos y 12 defensivos, 2 tapones, 4 recuperaciones)

También jugaron:

19. JUAN DAVID Pernías: 3 puntos (1 libre, 1 rebote)

18. DANIel Giménez: 9 puntos (3 libres, 1 rebote)

7. DOMINGO Millán: 9 puntos (1 libre, 1 asistencia, 2 rebotes)

17. CARLOS Robles: no jugó

6. JUAN FRAncisco Blaya: 0 puntos

15. ÁLVARO Morales: no jugó

Delegado de equipo con funciones de entrenador: Santi Pérez

Entrenador: Antonio Quiñonero

Delegado de equipo: José David Millán

Delegado de campo: Sergio Zaragoza

Rebotes defensivos: 22

Rebotes ofensivos: 11

Balones perdidos: 14

Balones recuperados: 7

Asistencias: 2

Tapones: 2

Zona 3”: 0

Pasos: 2

Faltas personales: 31 (Con 5 Erre, Juanda y Dani, con 4 Domingo, Miñarro y Juan, con 3 Paco, con 1 Fran)

Parciales: 12-16, 13-12, 15-14, 21-19 y 8-13 (P)

Marcador final: CB Lumbreras 69 Mil Palmeras de Campoamor CD Duna 74

Incidencias: Encuentro correspondiente a la Séptima Jornada de la temporada 2010-2011 de la Liga Regular “A” de 2ª Autonómica masculina murciana. Unos 25 espectadores en las gradas del Pabellón de Puerto Lumbreras. El árbitro principal del partido fue Moreno, J.M. y el auxiliar Martínez, S. (mal ambos). El CB Lumbreras jugó con todos sus efectivos, y el CD Duna con 4 bajas. Carlos Robles tuvo que presentar DNI por estar su licencia federativa aún en la FBRM tras cumplir ya su sanción. El CB Lumbreras no presentó acta del partido ni dispositivo de 24 segundos operativo.